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Diario de una neurótica

Es mi opinión

Aprender a desaprender

A lo largo de nuestra vida vamos absorbiendo de todo, incluso a veces criticamos algo que sin darnos cuenta y aunque nos parezca mal hemos interiorizado irremediablemente. A mi me pasa eso con mi madre concretamente. Somos muy distintas y según mis principios, mi punto de vista, mi estilo, etc. ella está totalmente equivocada en el modo de afrontar o enfocar muchas situaciones o planteamiento de la vida. Un ejemplo de ello es lo del tradicional refrán “después de la tormenta viene la calma”. Mi madre esto lo tiene bien sabido y entre tormenta y tormenta no descansa. Cuando algo va mal porque va mal y cuando algo va bien ojo que está a punto de fastidiarse, no te relajes. Es decir, ella nunca vive el momento presente siempre está más allá. Siempre tiene en la boca coletillas como “si hubiera”, “podríamos haber”, “por si acaso”, etc. son lo que yo llamo el saco de los “porsiakas”. Y así no vive, le pasa como a otro famoso dicho por Mª Teresa de Jesús: “Vivo sin vivir en mí, y tan alta vida espero que muero porque no muero” pero adaptado a ella. Siempre está pensando en como hacer las cosas mejor de las que las hace en lugar de disfrutar de lo bien que las ha hecho. Cuando yo era pequeña si sacaba un 9 me exigía un 10 y si sacaba el 10 me decía que no podía relajarme porque tenía que ser siempre así y en lugar de premiarme por ello no le daba importancia, porque era lo normal (lo que se esperaba de mí). Vive en una especie de Gran Hermano imaginario en el que cree que todo el mundo le observa y está pendiente de ella y siempre hay que hacer las cosas de determinada manera (como lo hacen los demás). Pero no todos los demás, sino los que lo hacen bien. Ejemplo: cuando estaba estudiando me decía que tenía que trabajar puesto que se podían hacer ambas cosas a la vez y había gente que lo llevaba divinamente, yo le decía que también había otra gente que sólo hacía una cosa o ninguna pero eso no contaba. Pero no os creaís que se ha conformado nunca porque cuando trabajaba y estudiaba me decía que tenía descuidada las tareas de las casas, a mi chico, a mis amigas o el deporte. Es decir. Siempre más. Pues bien, me gustaría empezar a desaprender lo aprendido. Quiero muchísimo a mi madre y sé que siempre lo ha hecho todo con su mejor intención pero ya soy grandecita y he decidido tomar mis propias decisiones (llevo intentándolo unos 7 años pero no hay manera… siempre seré su hija pequeña). Estoy deseando independizarme sobretodo por el hecho de tener mi propio espacio y de poder sentarme a ver una película sin tener que oír “¡Qué bonito! ¿Es que ya lo tienes todo hecho?”. Le he explicado mil veces que nadie lo tiene todo hecho nunca pero que hay que racionar las cosas y lo mismo que uno trabaja X horas al día también tiene derecho a descansar y disfrutar de momentos de ocio, pero qué le voy a contar a ella si no sabe lo que es eso TristeLas vacaciones, por ejemplo, para ella son sinónimo de no parar excepto para dormir y recorrerse todo lo que sea posible visitar en el lugar en el que se encuentre. No es que a mí no me guste ir a visitar lugares o elementos turísticos pero yo considero que las vacaciones son para descansar, estés donde estés. Tienes que desconectar y para eso no puedes estresarte. A veces le digo que me gustaría ir a Roma y pasarme una tarde entera tomando un capuchino con mi chico en la Piazza di Roma y pasar la tarde hablando o leyendo un libro en la terraza del café y eso le saca de sus casillas. ¡¿Cómo ir a Roma y sentarse?! Cada vez estoy más saturada de la educación que ella recibió y que lamentablemente me transmitió (una vez más involuntariamente). A veces me da pena porque ella no se da cuenta y al menos yo tengo salvación porque estoy siendo consciente de ello y puedo evitarlo. Todo no, está claro. La obsesión por la limpieza y el orden es algo que heredé de ella y que jamás lograré quitarme de encima, pero bueno, tampoco me importa demasiado ese tema. Sin embargo, el hecho de sentirme culpable cada vez que no estoy estresada y hasta las cejas de trabajo no lo soporto. Estas son mis primeras vacaciones desde que terminé el instituto. Desde entonces he pasado los veranos trabajando y estudiando y esta es la primera vez que no estoy haciendo ninguna de las dos cosas. Ahora mismo estoy esperando que salgan las listas de la Generalitat y me convoquen como interina en algún instituto y mientras tanto aquí estoy en casa y haciendo respiraciones para controlar mi ansiedad porque me da miedo a la vez que me hace ilusión dar este nuevo paso de entrada en mi sueño de ser profe pero sobretodo porque me siento culpable de tener tiempo libre (a pesar de tener la casa reluciente). Lo dicho, lo mejor sería desaprender lo aprendido, intentaré trabajar en ello y con más profundidad cuando logre independizarme y forjar un hogar nuevo con nuevos principios como por ejemplo tal y como dice René Russo en la película de Míos, tuyos y nuestros “el hogar esté hecho para la libre expresión, no para causar buena impresión”. También hay otra frase que leí en algún lugar que decía que no debíamos sentirnos culpables o temer a disfrutar de un buen momento por el miedo a pagarlo en el futuro ya que todo lo bueno que te pase lo has pagado de antemano. Así que intentaré ver estas vacaciones como el resultado de años de sacrificio y trabajo sin vacaciones y disfrutaré de ellas. O al menos lo intentaré!

Litros de comedia romántica!!!

Si las comedias románticas (sobretodo las americanas) fueran litros de alguna bebida yo sería adicta y alquilaría un apartamento como almacén de esta; y es que la energía, el buen rollo y esa sensación tan buena que me deja en el cuerpo una comedia romántica no me la deja nada. Últimamente ando un poco entre vaga y desganada respecto a todo y ni siquiera me apetecía ver la tv. Y es raro pq el cine es mi gran pasión por encima de cualquier cosa pero... ¿todos tenemos épocas tontas no? En fin, hoy me he dicho "basta" y me he obligado a mí misma a ver una de mis pelis: El sueño de mi vida .Y el resultado ha sido genial como siempre: me ha quedado una sensación de muy buen rollo y alguna q otra idea llena de energía y positividad. No se trata de q este tipo de pelis sean superpeliculones pero para mí son las mejores pq me hacen pasar un buen rato en el que me olvido de todos mis asuntos y no sufro demasiado pq suelen ser predecibles y siempre ganan los buenos (aunque a veces te asustas). Mucha gente odia este tipo de películas y se las da de intelectuales buscando grandes dramas, películas históricas, superproducciones o los más recientes thrillers pero yo creo q para gustos los colores y cada uno busca lo q busca en una peli. Yo busco lo q la comedia romántica me ofrece: soñar, divertirme, el triunfo del amor verdadero y el mensaje de q la vida es bonita y uno tiene derecho a ser feliz. Siempre he dicho q creía en los príncipes azules y mi niño me ha demostrado q existen pero nadie dijo q fueran perfectos, sólo eran azules. Lo mismo pasa con la gente q piensa q estas películas son pura fantasía y q esas historias no existen, yo pienso q sí existen pero hay q contemplarlas bajo 2 requisitos: 1) hay q creer en ellas; 2) hay q tener en cuenta de q te cuentan una parte de la historia, no la historia entera; por supuesto después de la boda final vendrá la convivencia del matrimonio y las pequeñas desavenencias que suele conllevar ello pero oye en 1'5h bastante tienen con llegar a contarte hasta la boda no? En fin la conclusión de hoy es que debería obligarme más a menudo a muchas cosas, cosas como ver más películas en lugar de dejar q me coma la apatía, o ir a correr aunque me cueste horrores pq todo son beneficios y lo notaré por dentro y por fuera, o cuidarme más y tener más paciencia con las cremitas y no tirarlas a la basura cuando pasan 2 semanas y no noto sus efectos (debería ponerme las dichosas cremitas sólo por el placer de darme un masajito...), o ser más positiva en los bajones pq al fin y al cabo las cosas acabarán sucediendo igualmente pero desde la óptica perspectiva se aguarda más a gusto su desenlace. Felices sueños!

Esclava del stress y las obligaciones

Está terminando mi primera semana de vacaciones REALES. En realidad terminé las clases a finales de mayo y hasta septiembre en teoría no tengo que currar así que me tocaban 3 deliciosos mesecitos de vacaciones este año. He de reconocer que esperaba que realmente fueran vacaciones-vacaciones, ya que es el primer año que no tengo que estudiar para septiembre pero... cosas de la vida: siempre me lío. Al final el mes de junio se me fue con historias y papeleo del tema profesional (y muchos nervios), el mes de julio entre limpiezas generales de esas q toda madre siempre cree q su casa necesita desesperadamente y el mes de agosto en un miniviajecito al sur y las vacaciones de mi chico así que esta semana q la casa quedaba prácticamente para mí sola y q él curraba pensaba q iba a disfrutar como una mona. Lo pensaba. Pero no. Resulta que aunq ha sido muy costoso obligarme a no hacer nada de provecho ni por obligación o compromiso y a dejar de lado la "dieta" y el deporte no he disfrutado TristeSoy un desastre. Lo sospechaba desde hacía tiempo pero ahora queda confirmado: soy una adicta-esclava del orden y las obligaciones físicas y morales. Me siento fatal por no cuidar mi cuerpo y haberme comido una bolsa de drakis esta mañana (no quería hacerlo pero precisamente por eso me he obligado a mí misma, para mandar a la mierda a ese pepito grillo). Pues fatal, me han caído fatal. No sólo por sentirme culpable sino porque me siento pesada y siento que no me estoy respetando a mí misma. A partir de mañana vuelvo a empezar con mi dieta sana y equilibrada baja en calorías y el deporte. Lo bueno de hacer dieta es que cuando te das un capricho como un bocadillo de salchichón te sabe a gloria bendita; cuando no te cuidas y comes todo lo que se te antoja sin embargo, todo te sabe igual. Será que lo que lleva esfuerzo luego recompensa como dicen por ahí... En fin, sobre el deporte lo mismo. Me gusta hacer deporte pero soy una perezosa, es como ir a la playa: nunca quiero ir pq me da palo pero luego allí me lo paso bomba y no quiero volver. Pues lo mismo con el deporte. Me da mucha pereza sea cual sea pero luego cuando termino machacada, después de ducharme me siento tan bien por fuera y por dentro... Es como hacer el amor justo después de una duchita GuiñoSobre el resto de cosas resulta que había decidido dejar esta semana para ver series, pelis, tv en general y leer sobretodo pero siento que si me paso todo el día viendo la tv es como si estuviera desperdiciando el tiempo. Una peli (o dos, quizá una después de comer y otra por la noche) están bien pq te animan el día y te sirven para enajenarte un poco de tu rutina cotidiana pero si las pelis se convierten en rutina al final pasa lo que me pasa a mí: q estoy deseando volver a hacerme listitas de cosas pendientes para poder ponerme las pelis o los yogures griegos como recompensa y tener la sensación de q realmente estoy disfrutando mi tiempo y mi vida. Mañana volveré a empezar, como tantas veces que decido cerrar un círculo y empezar otro. Y lo haré de la mejor manera que lo hago siempre, con mi película-reanimadora por excelencia que me hace recordar q vida no hay más que una, q es esta y que cada segundo, cada beso, cada caricia y cada sonrisa cuenta: 7 días y una vida.

 

Echaba de menos…

Echaba de menos…


Acabo de volver después de una semanita por Badajoz y Sevilla entre familia y familia política y la verdad es que lo echaba de menos TODO. Justo antes de irme estaba al borde el ataque de nervios por las mil cosas que quedaban por hacer en casa, las pocas que parecía que había hecho, los líos y enredos que lleva convivir con una madre más neurótica que la hija, un hermano que vive en casa como en un hotel y un padre adicto a las telenovelas, etc. Además últimamente mi rutina diaria me estaba devorando por momentos y necesitaba salir. Pues bien, me he dado cuenta de que a veces lo que más detestamos es lo que más queremos. Un ejemplo de ello es el tema de las comidas: acostumbrada a mi dieta sana, equilibrada y un poco cansina de alimentos a la plancha, verduras hervidas y crudas, lacteos y frutas, una semanita fuera de casa a base de una oferta de bocadillos, fritos, tapas, embutidos y warradas en general me ha hecho desear a gritos una buena comida a base de ensalada y pechuga a la plancha!! Nunca pensé que lo echaría tanto de menos... Por otro lado, como a todo nos ocurre extrañaba mi colchón y es que en casa es donde mejor uno duerme y es que yo creo que aunque el Sr. Flex me invitara a alojarme en su enriquecida mansión echaría de menos mi cama. También extrañaba mi queridísimo pc con acceso a internet, y es que digan lo que digan de que en los pueblos se vive bien yo soy de ciudad. Tampoco viviría en una capital de provincia pero me encanta donde vivo a medias entre un pueblo y una ciudad, lo que en inglés sería town (entre la city y el village). Y la playa... aishhh lo que he echado de menos mi playita!!! Pero sobretodo, sobretodo no podía pasar un día sin pensar en mis gatos y es que son tann tann adorables y cariñosos que no puedo pasar un día sin ellos. Aquí os dejo una foto de estas monadas: Sort y Minok Guiño

22 de julio de 2007

Hola me llamo Britanny y soy maniática

Soy una maniática, lo reconozco. Sé que tengo montones de manías pero luego si me pongo a enumerarlas tan sólo me salen unas cuantas: tengo que poner el despertador dos minutos después de en punto y de y media (’02 y ’32), no puedo aparcar con la música alta, cuando hay anuncios automáticamente le bajo el volumen a la tv, no soporto la sensación de polvo en las manos o en los pies ni un solo minuto, hago listas para todo pq me aterroriza olvidarme de algo, soy extremista y veo las cosas blancas o negras (no concibo el gris), si hago dieta la hago en serio y acabo antes con todas las tentaciones (me deshago de ellas), me gusta cumplir mis horarios de sueño, comidas y ejercicio sin alterarlos, cuando me cargo una rutina deportiva no puedo continuarla tengo que retomarla a la semana siguiente, necesito absoluto silencio para dormir (incluso a veces duermo con tapones), cuando veo una película grabada no puedo perderme ni un segundo de lo que dicen y si alguien me distrae la rebobino hasta donde me quedé (aunque solo hayan sido unos segundos), y bueno mil cosas más. Sin embargo esta mañana me he dado cuenta de una de las más grandes. Hace unos días que estoy un poco baja de moral de ánimo y de ganas para todo por muchas cosas y por ninguna a la vez, de hecho estos dos meses de junio y julio han sido un asco por mil cosas. Pero aunque esas cosas se hayan ido acabando no podía volver a estar bien, algo me lo impedía sin saber el qué, era como si esperase algo, en cierto modo a que alguna cosa me indicara que se había cerrado el círculo. Esta mañana, de repende, me he levando mejor de ánimo y más dispuesta a retomarlo todo y redirigirlo de nuevo y cuando estaba desayunando al mirar el calendario me he dado cuenta: con mi vida me pasa como con mis rutinas de ejercicio, si se quedan a medias no puedo volver a subirme al carro y tengo que esperar a un carro nuevo. Es decir, no podía retomarlo todo pq no tenía esa sensación de limpieza, orden y bienestar que tanto me gusta a nivel físico y emocional y hoy ya era más viable porque es día uno. Solo por eso. Al ser día uno comienza un nuevo mes y por lo tanto el círculo anterior se cierra y se abre uno nuevo lleno de nuevas oportunidades. Así que hoy es día de reflexión y de orden para encarrilar este nuevo mes o esta nueva etapa. Lo dicho, soy una maniática.

Tanto tiempo esperando el verano y llega esto

Hay que ver cómo ha venido el veranito este año, y todo a modo de aviso por parte del cambio climático. Y es que nos estamos cargando el planeta. Con tanta tecnología y todavía no hemos aprendido lo más básico: hay que cuidar la materia prima, es decir, la naturaleza. Pero nosotros nada, nos liamos a construir, a talar árboles, a emitir gases, a tirar basura en medio del bosque, etc y claro luego nos quejamos cuando pasan estas cosas. Reconozco que siempre me ha gustado más el invierno que el verano, porque me gustaba estar sola y ver una película en un día de frío y lluvia con una taza calentita de neskuik y una manta en el sofá. Pero todos cambiamos y últimamente prefiero un buen día de sol, color y música alegre. De hecho, llevo todo el año esperando el verano. Este en concreto. Y es que este es mi primer verano de verdad, porque este año no tengo que estudiar. ¡Por fin! He cerrado casi por completo (hasta que me decida a hacer opos) mi etapa de estudiante. Ahora seré yo la profesora, "Dios nos coja confesados" -como diría una abuela católica en una peli americana. Llevo todo el año deseando que lleguen estas fechas para dedicarme a mis hobbies, a tomar el sol, a ver la tv por gusto y no por la necesidad de desconectar del stress, de hacer deporte por lo mismo, de echar mano de esa lista eterna de cosas que QUIERO y no TENGO que hacer. Y todo para esto. A fecha 12 de julio y todavía duermo tapada hasta el cuello y no abro una ventana ni de día ni de noche y es q no es sólo que no tenga calor que ya es raro es que incluso a veces tengo frío (vale, vale soy superfriolera, admitido). Pero lo que más me fastidia no es eso, ya q a mí pasar calor no me gusta nada, llevo mejor lo del frío; lo que más me afecta es cuando hace un día como el día: nublado. Cuando está nublado en invierno uno incluso medio-sonríe pero cuando está nublado en verano la mayoría de los días como es mi caso aquí en Barcelona, es que te entran ganas de tirarte de los pelos. Y es que con esta luz, este día, este clima no dan ganas de nada. Y cuando digo de nada es de nada: ni comer, ni dormir, ni salir, ni leer, ni ver la tv, ni de nada. Y es que odio las medias tintas, lo reconozco. Soy extremista y esa es mi cruz para todo, para bien y para mal: a mi que no me toquen las narices o que haga sol o que llueva leche que estoy entrando en un estado agobio-depresivo nada divertido. A este pasado acabaré bajando todas las persianas de la casa y dibujando en ellas la playa, una sombrilla, un sol enorme y gente en bañador divirtiéndose. Así al menos cuando haga uno de estos días bajaré las persianas, encenderé la luz, plantaré una tumbona en el comedor y música con sonidos del mar de fondo y trataré de salir del paso ;)

 

He vuelto...

Después de siglos sin escribir aquí, he vuelto. No es que haya dejado de escribir (no podría) sino que siempre lo escribo donde me pilla y rara vez me pilla delante del pc. De todas formas merece la pena transcribirlo aquí porque queda más bonito en una web que en una libreta llena de tachones, aunque yo no podría vivir sin poder escribir y hacer un tachón. Uno de los motivos que me ha llevado a dejar de lado el blog es uno de mis grandes fantasmas: mi preocupación por los demás. Cuando empecé este blog lo empecé como algo muy íntimo, muy mío, como un sitio más bonito que una libreta para escribir mis cosas. Sin embargo un día surgió un comentario, luego otro, etc. miré ese apartado donde pone "estadísticas" y me dí cuenta de que "mis cosas" las leían otras personas y entonces surgió un pequeño conflicto y empecé a preocuparme más de lo que escribía o de cómo lo escribía. Quizá ahora me pase como a muchos artistas (no es que yo lo sea ni mucho menos, no conozco a nadie con menos probabilidades que yo) y he vuelto a mis principios. Ahora volveré a escribir para mí, y si tú lo lees a mí no me importa. Lo importante soy yo y este fantástico anonimato que la tecnología nos proporciona. Cualquiera es bienvenido a seguir leyendo, dejar de leer, volver a leer, opinar en concordancia, discrepar, añadir o no volver jamás, la libertad es un derecho de todos permitámonos gozar de ella. Bienvenidos.

El PODER es el opio del pueblo del siglo XXI

Todos tenemos ansía de Poder (con mayúscula) en nuestro interior, sólo que unos con mayor y otros con menor porcentaje. El Poder es el motor q mueve el mundo, ya sea disfrazado de dinero, de sexo, de riquezas materiales, de fama, prestigio, etc. Y lo peor es que es un gusano de los más ambiciosos, mientras más tenemos más queremos. Somos capaces de pasar varios meses sin blanca y que nos ofrezcan un curro y rechazarlo porque habíamos pensado encontrar otro en el que nos pagaran más; somos así de idiotas, porque es sólo un ejemplo. A veces sueñas con el tercer escalón y tonto de ti rechazas subir el primero porque tu estás pensando en el tercero y ya quieres estar ahí, sin pasar por el primero. Sé que hoy tengo un día apático, gris y lleno de hastío al estilo Holden Cauldfiel pero sinceramente creo que si se nos presentase un genio con una lámpara y nos concediese 3 deseas, la mayoría elegiría:

1) Quiero poseer un número ilimitado de deseos.

2) Quiero ser immortal para poder disfrutar de mis deseos ilimitados.

3) Quiero que nadie más pueda poseer un número ilimitado de deseos.

Y somos así, aunque nos cueste creerlo y penséis que exagero, pero en el fondo aunque como las misses de las pelis americanas queramos pensar que nuestro primer deseo seria "la paz en el mundo", creerme que si como opción a estuviera la paz en el mundo y como opción b nº ilimitado de deseos la opción no la elegiría ni el Papa (claro está que seguro que él alegaría que con un nº ilimitado de deseos podría hacer más cosas buenas, o no?).

El problema de siempre: se me olvida q EXISTO!!!!

Acabo de pasar un capítulo de mi vida q ha resultado muy bonito, doloroso tb, pero bonito sin duda. No sé si la historia continuará en otro capítulo más adelante pero eso ya no depende de mí. Después de haber conocido a un chico genial y haber compartido con él momentos muy bonitos el destino ha querido que se interrumpiera la historia. Yo lo intenté, puse todo de mi parte pero de momento parece que sólo el tiempo tiene la respuesta a mis preguntas. Lo curioso del asunto es que después de un par de días en plan zombi por mi casa, llorando por los rincones (y por las esquinas), atormentándome con mil preguntas sin respuesta y suplicando a mi teléfono q sonora bajo la música de las nuevas oportunidades me he dado cuenta de algo: otra vez el mismo error de siempre por mi parte. Ese error tan recurrente y tan impresionantemente importante que parece ilógico y absurdo q se repita tan a menudo: se me olvida q existo. Quiero decir q centro tanto mi atención en el resto de las personas q a veces me olvido de mí. En este caso en concreto, he estado tan preocupada por imaginar cómo estará él, q estará pensando, q estará haciendo, si comerá y dormirá con normalidad y mil cosas más q se me ha olvidado preocuparme de cómo estoy yo, de lo q pienso y lo q hago y sobretodo de comer y dormir. Llevo unos días viviendo en el infierno de la ansiedad, la desazón, el desamor, la tristeza y culpabilidad. Sí, culpabilidad. Me sentía culpable pq al parecer le he hecho bastante daño sin haberlo percibido; y eso me mata pq cuando quieres a alguien harías lo imposible por evitarle cualquier sufrimiento por mínimo q fuera y lo peor q puede ocurrir en un caso así es q la fuente de su sufrimiento seas tú. A la vez q culpable me sentía como cumpliendo condena por dicho pecado desconocido y la cuestión es: ¿Cuál ha sido mi delito? ¿Protegerme a mí misma de los desconocidos y no concederles ni un resquicio de confianza hasta conocerlos minimamente? ¿Hacer lo imposible pq funcionara asegurando cada paso? O lo q me temo q será lo más acertado: ¿dejar intervenir a la razón en los asuntos del corazón? Una reacción típica en mí ahora mismo sería decir “lo siento”. Pero la realidad es q no es así, no lo siento. No siento mirar por mí, cuidarme, protegerme, y haber aprendido q en la vida no todos somos buenas personas. Justo tras llegar a este argumento mi mente multifunción ha llegado a otra cuestión importante a tener en cuenta: ¿Por qué tras la ruptura de una relación donde ambos hemos disfrutado me siento desgraciada y con sensación de q la pérdida ha sido mía? Es absurdo. Los dos la hemos disfrutado y la hemos sufrido. Los dos nos sentíamos felices y afortunados al lado del otro. ¿Por qué coño siento q yo he salido perdiendo? Es curioso. Esto me recuerda a cuando pienso en el sexo con alguien q no conozco y me asalta el temor q tras el polvo el tío se pire y yo me quedé ahí tirada en la cama sintiéndome utilizada. ¡¿Pero q caray me pasa?! Pues lo de siempre: q se me olvida q existo. Se me olvida q él tb me ha querido y tb me va a echar de menos, q le va a costar encontrar a otra q le llene a todos los niveles como lo he hecho yo (según palabras suyas) y se me olvida q durante el polvo disfrutamos los dos y nadie actúa en esta vida de forma gratuita, todos queremos algo a cambio de algo por mínimo q sea. En estos momentos me siento muy ingenua, es una sensación comparable a la de hace un año (un año señores y tengo 23, tiene tela lo sé…) y descubrí q, contrariamente a lo q yo había pensado toda la vida: John Wayne nunca ha sido el bueno de las pelis de indios y vaqueros. Uno de los héroes americanos del lejano oeste en mi infancia era malo, de hecho, era “el malo”!!! Los buenos eran los indios, pobrecillos, dejándose la vida por defender sus tierras mientras llegaban los yankies con mil excusas y bajo la palabra de Dios (autoadjudicada) declaraban q tenían derecho sobre las tierras y sobre los demás. Vamos q viendo la actualidad estadounidense y ese presidente americano cuyas actuaciones confirman q efectivamente el hombre viene del mono… la vida no ha cambiado tanto. Lo malo es q al menos yo lo he descubierto con 23 añazos pero todavía hay personas q piensan q Bush es el bueno… ellos sí q tienen tela!! Bueno, a lo q estaba, q me voy por las ramas. Me he sentido muy ingenua al darme cuenta de q estaba tan preocupada por él y por lo q yo me perdería de ahora en adelante q se me ha olvidado q yo soy la parte importante en mi vida: la única, pq soy la prota (aunq creo q esto me pasa pq me encanta ver pelis y claro a veces sigo con el rol de espectadora incluso tras las letras de “The End”). Además, mira q pensar q todo ha sido culpa mía y q he sido mala… esto si q es tener tiempo libre, definitivamente tengo q apuntarme a algún cursillo de lo q sea con tal de evitarme estas comeduras de olla. ¿Yo la mala? Pero si lo único q he hecho ha sido quererle y actuar con precaución. ¿Culpa mía? Como si esta relación hubiera sido sólo de uno…Pero ya se me ha pasado la paranoia, eh. Lo cierto es q duele y eso no se puede evitar, es un trago necesario por el q hay q pasar cuando has querido a una persona. Es como el precio q se paga por la satisfacción q provoca el amor, no te puedes ir sin pagar. Y yo lo he pasado fatal estos días y ahora aunque de una manera más liviana todavía me queda un buen trecho imagino. Pero bueno, al mismo tiempo, tras haber recordado q existo y todas estas cosas me siento mucho más tranquila, relajada y desahogada. Ya no tengo ese sentimiento humillante que me sobrecogió cuando al día siguiente le mandé 2 sms: en uno le decía q le quería y le echaba de menos y q lo único q quería era estar con él (sin más condiciones). En el otro le decía q a riesgo de parecer pesada me negaba a quedarme de brazos cruzados sabiendo que había un chico del q estaba enamorada y q vivía relativamente cerca. Los envié a modo de gastar mis últimos cartuchos y pq necesitaba q supiera q había sido muy importante para mí y q yo seguía teniendo la puerta abierta. Pero el resultado fue un cariñoso y educado mensaje suyo en el q me pedía q no le mandara esos mensajes pq le hacían daño y no eran apropiados a la situación. Ahí fue cuando me sentí humillada además de rechazada. Yo es q tengo ese don, sabes? Soy genial machacándome a mí misma cuando peor estoy. Pues bien, lo cierto, es q la perspectiva hace mucho y ahora no lo veo así. Ahora me doy cuenta de q en aquel momento actué siguiendo a mi corazón, q ansiaba decirle q le amaba, y querer a alguien no puede ser nunca humillante. Ahora me siento bien, genial, y en paz conmigo misma por haberlo hecho. Yo he creído en nosotros y he luchado hasta el último momento. Por mi parte ya está todo hecho. Ahora la pelota está en su tejado y es decisión suya moverla o dejarla ahí para siempre. De hecho, este tema de no saber si él ha cerrado la puerta o la ha dejado entornada tb me estaba consumiendo pero ese ha sido otro gran descubrimiento (es q hoy estoy sembrada chico…): ¿q diferencia hay desde mi posición? ¿q más me da q esté cerrada o entornada? No me toca a mí mover ficha, yo ya hice mi jugada. Ahora lo q me toca es retomar el resto de aspectos en mi vida q he dejado temporalmente apartados tras el disgusto. Muchas ganas no tengo la verdad, pero bueno quizá tb influya q estoy dolida y físicamente cansada. Pero bueno, sé de buena fe q día a día el dolor irá menguando y a fuerza de descanso y buena alimentación la energía se recupera. Así q aunq me faltarán ganas tendré capacidad para ponerme a ello ;) Al menos yo no tengo temas pendientes ni en los q reflexionar y puedo volver más fácilmente a mi rutina, esta el parte buena de q te dejen. La parte mala se la lleva el q deja, q el pobre pasará toda su vida con la duda de si tomó o no la decisión adecuada. Una vez más, la respuesta está en el tiempo. Buenas noches!!

A veces la vida se pasa de vueltas

Hace siglos que no escribo aquí, no por falta de ganas sino más bien por vaguería como todo el mundo. Weno y también porque he estado ocupada viviendo mi vida, pq no decirlo? a veces uno tiene q pararse a vivir un poco para poder escribir sobre ello después.
Desde que no actualizo esto han pasado mil cosas... incontables, inclasificables, sorprendentes, atonizantes, maravillosas, tristes, e indescriptibles (todas ellas).
Pero paso de ponerme ahora a intentar crear una biografía actualizada, todo irá surgiendo cuando sea necesario. Hoy tengo ganas de hablar de otra cosa, así q voy a ello.
¿Alguna vez no te ha pasado que sientes q la vida se pasa de vueltas? A mí a veces me ocurre: cuando me enfado tantísimo que empiezo a reírme como una loca o simplemente respiro hondo como si todo hubiera pasado y estuviera ya resuelto simplemente pq es tanto el enfado q no me cabe en el cuerpo así q me pasa como si fuese un trailer por la cabeza a 200 por hora todo el proceso y voy directa al final, cuando se te pasa y le quitas importancia. Otras veces algo es tan triste que no me queda suficiente tristeza para vivirlo y simplemente me doy una ducha o un paseo o un sueñecito y pienso en otra cosa. Pero mi favorita es una novedad para mí desde hace unos meses, soy tan feliz q no tengo palabras. Suena presuntuoso lo sé, pero todo tiene su explicación. Hasta ahora pensaba que nunca sería feliz, no sé.. como si hubiera nacido con ese defecto "incapacidad de disfrutar de la felicidad". En mi vida he tenido momentos de felicidad como le pasa a mucha gente pero nunca he sentido por más de un instante la sensación de satisfacción, autorrealización, plenitud y paz interior que yo llamo felicidad. Esto no quiere decir que mi vida sea perfecta ni mucho menos, ni tan siquiera que lo tenga todo (gracias a dios me keda mucho todavía por cosechar en el camino). Simplemente quiere decir que AHORA, en este preciso instante soy feliz. Me gusta mi vida (tb hay cosas q no me gustan pero me gusta tener la capacidad y las ganas de cambiarlas e ir viendo la evolución); adoro a mi familia (aunq a veces estoy deseando q me dejen trankila... como todos, pero eso tb me gusta pq cuando estoy sola en casa me falta el jaleo, las discusiones, etc y los echo mucho de menos a todos); estoy embobada con los animalitos de mi casa (los gatos, la perra,.. hasta las tortugas!) son un amor; tengo la suerte de tener los amigos más mejores del mundo que me quieren tal como soy y que les gusta disfrutar de mi compañía y compartir mis locuras, mis paranoias y mis subidones de energía (niños soys los mas megawachisdelespacio); me encanta ese momento del día en el que después de salir del gym (y disfrutar de ese cansancio tan maravilloso y contradictorio)cojo el coche y me voy a la playa, me siento en la arena y miro el mar, a veces cierro los ojos y respiro su brisa, otras escucho la música de las olas y muchas otras la música la pone mi reproductor de mp3 (el mejor invento del mundo, dios cuanta falta hacía esto en mi vida!!). Me encanta todo eso, ahora siento q soy feliz. Una mirada, una sonrisa, un paisaje, cualquier cosa me hace darme cuenta de que la vida es un todo, con todo lo bueno y todo lo malo y yo de momento estoy experimentando algo nuevo: ser optimista y aunq viva ambos aspectos tener en cuenta solo el bueno y contemplar el malo como necesario para experimentar el bueno porque... si no conocieramos la tristeza no sabríamos apreciar la alegría.
Me quedaría toda la noche escribiendo mis historias mentales pero... tengo pensado vivir mucho tiempo y habrá tiempo para todo ;) De momento deciros q estoy en muy buena sintonía con la canción de Melendi "Caminando por la vida", os dejo la letra por aki para recordarla:
Huele a aire de primavera,
Tengo alergia en el corazón.
Voy cantando por la carretera
de copiloto llevo al Sol.
Y ami no m hacen falta estrellas
Q me lleven hasta tu portal
Como ayer estaba borracho,
fui tirando migas de pan.

Voy caminando por la vida, sin pausa pero sin prisa,
Procurando no hacer ruido vestio con una sonrisa.
Sin complejos ni temores, canto rumbas de colores
Y el llorar no me hace daño siempre y cuando tu no llores
Ay siempre, y cuando tu no llores Ay...

Y el Milindri a mi me llaman
En el mundillo Calé!
porque al coger mi guitarra
Se me van solos los pies
Y este año le pido al cielo
La salud del anterior
No necesito dinero
Voy sobrao en el amor.

Voy caminando por la vida, sin pausa pero sin prisa,
Procurando no hacer ruido vestío con una sonrisa.
Sin complejos ni temores, canto rumbas de colores
Y el llorar no me hace daño siempre y cuando tu no llores
Ay siempre y cuando tu no llores Ay...

Y no quiero amores no correspondidos,
no quiero guerras,
no quiero amigos que no me quieran sin mis galones.
No me tires flores
Ni falsas miradas de inexpresion,
que no dice nada del corazon que me las propones..
Porque..

Voy caminando por la vida, sin pausa pero sin prisa,
Procurando no hacer ruido vestío con una sonrisa.
Sin complejos ni temores, canto rumbas de colores
Y el llorar no me hace daño siempre y cuando tu no llores
Ay siempre y cuando tu no llores
Ay... Siempre cuando tu no llores,
siempre q no me abandones...

Moda canalla

Recientemente se ha recuparado una palabra del diccionario que describe bastante bien algunas tendencias sociales que se dan en nuestra sociedad: la ropa, el habla, la tv, la música, etc. Si os dais cuenta ultimamente en algunas serie de tv encontramos a jóvenes personajes masculinos que siguen un perfil bastante característico, pondré algunos ejemplos: Paco (Hugo Silva) en la serie de Tv1 Paco y Veva y Rafa (Alberto Amarilla) en Mis adorables vecinos en el apartado de españoles actuales, luego estaría el actor Benjamin McKenzie como Ryan Atwood en la serie The O. C. y como representante de la juventud de la década de los 80 de nuestro país tenemos a Félix Gómez encarnando a Enrique Ortega en Los 80 de Tele 5. Este abanico de personajes responden al perfil del chico pobre pero encantador que muestra una rebeldía atractiva pero dulce en el fondo bajo una capa de frialdad que ni ellos mismos se creen porque no hay que ser adivinos para saber que esconden el más romántico de los corazones. Todos responde a un estilo semejante a la hora de vestir aunque alguno tenga su marca personal como el chico de los 80 con su chupa de cuero; sin embargo, una cosa que se puede notar a golpe de oído es los rasgos que presentan en el habla los personajes de Paco y Rafa que con un tono chulesco denotan pinceladas chelis.
Pero si el adjetivo "canalla" sobresale en estos momentos es, sin duda, en el mundo de la música bajo la categoría de rumba canalla. Estopa
y Melendi son representantes emblemáticos de este genero y también dos de mis elecciones más preciadas dentro de mi colección de música. Dos grupos musicales que tienen mucho en común (profesionalmente hablando) ya que ambos responden a la categoría que se ha bautizado como "rumba canalla". Tanto David como Melendi tienen voces macarras y aunque sus letras difieran bastante en temática o vayan por caminos distintos, los dos componen en el fondo bajo la estela del romanticismo (cosa que ninguno de los dos niegan). Y como dice una de las frases habituales de Melendi, no pretenden cambiar el mundo, pero sí ser testigos y narradores de lo que les rodea. Escriben sobre la realidad de sus entornos y la cotideanidad que les envuelve. Se rebelan y protestan contra el sistema establecido y gracias a ellos miles de personas viven momentos inolvidables en los que la banda sonora la componen ellos. Los galanes de antes equivalen a los macarras de hoy.

Piratería y legalidad

Es muy fácil decir que uno está en contra de la piratería y del top manta -sobretodo bajo la excusa super fashion de que explotan a los pobrecillos que están en la calle vendiendo- la mayoría opta por defender esta causa incidiendo en el derecho de autoría de los artistas y todo ese rollo. Lo más fácil es destruir todo el material y hacerlo ilegal culpando al comprador, cuando estoy segura de que si curiseásemos en la casa de más de un defensor de esta idea encontraríamos algún que otro cd pirata... pero paremos por un momento la batalla y pensemos en las causas: ¿por qué creen que la gente compra cd's piratas? ¿quizá porque les queda más cerca que El Corte inglés? ¿por hacerle un favor al pobre inmigrante sin papeles que están explotando y así permitirle comer ese día? ¿porque toca más la moral que el reproductor te joda un original que una copia? ¿porque quieres escuchar la música de determinado cantante sin contribuir a su inmensa fortuna? Yo creo que no. En mi opinión la apareción de la piratería nació del bando contrario porque seamos realistas, ¿alguien cree adecuado el precio de un cd original? Porque yo, particularmente, lo encuentro desorbitado (entre 20-30€ por cd). Entiendo que crear un cd conlleva unos gastos de producción que deben cubrirse y al mismo tiempo procurar beneficios para que el negocio sea fructífero pero sinceramente opino que por la mitad del precio actual o un poquito más se puede conseguir todo eso y que además se aumenten las ventas y se permita el acceso de más músicos que merecen una oportunidad. Opino que ambas partes saldrían ganando puesto que la discográfica obtendría sus beneficios y el cliente podría disfrutar de sus artistas favoritos contribuyendo a que estos puedieran grabar más discos. No todo el mundo puede permitirse comprarse un cd siempre que quiere o incluso el cd que quiere porque algunos no gozamos de un sueldo decente (ese ya es otro tema). Ocurre a veces que un grupo consigue grabar un disco y no tiene todo el éxito que se esperaba; sin embargo, llena los conciertos (sobre todo si son gratuítos) y disfruta del calor de sus fans y el placer de escuchar la canción que ha compuesto en boca de miles de personas y lamentablemente no puede seguir adelante porque la venta de discos no ha cumplido las expectativas aunque su canción suene en coches, casas, locales, y miles de bocas. Esto ocurre porque el cd pirata ha eclipsado al original y debido a ello dichos músicos no pueden cumplir su sueño y abandonan sus carreras profesionales volviendo a los garitos de barrio y a la intimidad. Este cuento podría tener un final feliz equilibrando la balanza y poniendo al alcance de cualquier bolsillo la adquisición de un original.